Namasté


Ayer vi mi primer elefante en Delhi, delante del apartamento donde vivo. El hombre que lo llevaba, un sij con turbante blanco, me dijo 'hola' en francés y me hizo un gesto para subir. Me lo pensé, pero tenía que ir a comprar y, subida a un elefante, no habría resultado del todo cómodo… Delhi no es la ciudad ni más fácil ni más limpia ni más ordenada para vivir. Es mucho más que eso. Nada más aterrizar, una señora india que viajó a mi lado desde Londres sin dirigirme la palabra, me bendijo con una sonrisa. Cuando salí de la terminal del aeropuerto, lo primero que vi fueron dos perros enganchados y una vaca en medio de una rotonda. Con el elefante, y tras cuatro días a 45 grados, he empezado a asumir dónde estoy. O eso creo…

Comentarios

(^o^) ha dicho que…
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(^o^) ha dicho que…
Pregunta tonta del hermano,
¿Dehli y Nueva Dehli... es lo mismo?

Ya tengo tu móvil indio (hindú?)
y te pego un toque en breve...

como tu me "namaste" por lo del apagón, pos te "namaré" yo!

jajaja

el hermano-fumao

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