Australia en llamas
A lo que iba: Al sur de Australia más de 20 incendios continúan activos después de casi una semana ardiendo, algunos de ellos todavía sin control y otros cerca de Melbourne (a unos 50 Km). De hecho, la ciudad ha amanecido hoy con niebla por el humo del fuego. Aniquilan animales, casas, parques nacionales y todo lo que se les ponga por delante. La cifra de muertos casi alcanza los 200, pero la policía advierte de que podrían acercarse a 300 y sin identificación posible para muchos de ellos (¿cómo se analiza el ADN de cenizas que han volado con los fuertes vientos?)
©Reuters
Se habla del peor desastre natural en la historia de Australia con "Our darkest day" y titulares apocalípticos por el estilo. El primer ministro de Victoria, John Brumby, lo ha descrito como "Hell on Earth" (Infierno en la Tierra). Y no es para menos. Todo empezó el sábado 7 de febrero después de una semana, día sí - día también, superando los 40 grados. Ese sábado, los 47. Ni en el desierto de Alice Springs. La televisión advertía: "Si no es por necesidad, eviten salir de casa". Hasta costaba respirar. La sequía y el viento hicieron el resto. Por eso, aún sobre-informados, la rápida combustión sorprendió a todo el mundo.
"Todos contra el fuego" en el cambio climático
Con resaca y las primeras cifras de fallecidos, nos despertamos el domingo. "Oh! 26 muertos!" me dijeron, echándose las manos a la cabeza. "Claro, con la poca población que tienen, se escandalizan enseguida estos aussies..." me dije, un tanto cínica ahora que lo pienso. Pero los daños fueron aumentando casi por minutos hasta que, al final del día, nos dimos cuenta de la magnitud de la tragedia.
Por si fuera poco, los pirómanos aprovecharon la ocasión para provocar nuevos fuegos o reavivar los extinguidos. De hecho, ya se ha formado una comisión especial de investigación para encontrar a los culpables. Se baraja además la posibilidad de culparlos con penas correspondientes a asesinato múltiple.
Lo increíble del caso es la solidaridad de la gente. No empezaré, pero podría enumerar centenares de historias de personas que han perdido todas sus pertenencias materiales (su casa es una montaña de ceniza y su coche, apenas unos surcos de acero derretido como la cera de una vela) pero no a su familia o amigos, por lo que todavía tienen fuerza para ayudar (dicen que una tragedia saca lo mejor de uno). En cada tienda, supermercado, 7-11, tranvía... hay una hucha para donaciones, desde el primer día de este desastre. En la calle no se habla de otra cosa.
Para indemnizar a los afectados, el Gobierno de Kevin Rudd ha desviado A$10 millones del paquete de A$42 ($27 billones) para estimular la economía australiana y frenar la inminente recesión de esta manida crisis global financiera. La Cruz Roja australiana y Salvos (la ONG de Salvation Army) actualizan cada hora el dinero recaudado, que ya ni sé los millones que supera. Hasta Obama ofrece ayuda. Y por descontado, las estrellas mediáticas aprovechan el filón para sacar partido de su faceta "comprometida", al más puro estilo Angelina.
Contradicciones
La realidad supera la ficción y algunas poblaciones han desaparecido literalmente del mapa porque el fuego lo ha arrasado todo. Tipo Hiroshima. A nivel psicológico, ¿cómo puede una persona pensar que lo que le rodeaba ya no existe? Recuerdo aquí al escritor Julio Llamazares. De vez en cuando explica en sus entrevistas que el pueblo donde nació, en León, naufraga al fondo de un pantano que Franco mando construir en los años 60, obligando a toda la población a abandonar el lugar, despojándola de su origen, infancia y recuerdos. Así, sin más, para construir una presa artificial.
Mientras tanto, a unos 3.000 Km. al norte de Australia, el estado de Queensland se inunda. Las autoridades advierten allí de no salir de casa por el peligro, entre otros, a ser atacado por un cocodrilo, que ya han empezado a acampar a sus anchas en las poblaciones anegadas.
Incluso en un país donde incendios e inundaciones forman parte de su historia, de su fama e incluso de su riqueza, esta situación ha superado la leyenda. Y pensar que la nieve y el frío me impidieron salir de Barcelona hace apenas un mes...
Comentarios
Per cert, no et fiquis amb l'Angelina, ok? Això és enveja d q sta amb el Brad... :P
Apa, una abraçada!
un petat
Crec que volies dir indemnitzar, no?
Sister! Gracias por el update!
Ke mogollón... ke mogollón!
Un brazo y mucha energía positiva
del bró que te misses you y te quiere mucho (2 eggs).
Pinto-bró
Aqui a NZ s'en parla tambe tota l'estona, sembla increible que hi puguin haver casi 300 morts i lo fotut es q encara no ha acabat, joder, la cosa no pinta gens be.
Esperem q acabi aviat...
Petons
aqui es nota qui se l'ha llegit ;P