“Everyone is an expert”
Eso es lo que me dijo el abogado de la empresa que me contrata cuando quedamos para empezar a tramitar mi visado: “Todo el mundo es un experto”, algo así como que la gente se cree muy lista. Y añadió: “Pero sólo debes hablar conmigo. No consultes ni al departamento de inmigración: si quieres saber algo, aquí tienes mi tarjeta. Cada vez que les llamas te fichan, y no es bueno que hagas preguntas…”Con esta advertencia a lo mafioso, mi MARA (Migration Agents Registration Authority) empezó a barajar en qué categoría y número podía clasificar mi CV. Hay que reconocer que al menos el tipo fue sincero: la carrera en periodismo “molesta”, no está en la lista de profesiones demandadas del país, “así que mejor potenciar la faceta humanista”, concluyó con semblante serio.
Y así fue como empecé a invertir (tiempo y paciencia, además de dinero) por un visado que no sabes cuándo se tramitará. Es más, que no sabes ni si se aprobará. Pero ahí está la esperanza, que es lo último que se pierde, y la ilusión, que de eso dicen que también vive el hombre.
Mientras tanto, los periódicos amenazan con la dichosa crisis mundial y el consecuente recorte de la cuota en inmigración para “salvar el paro de los australianos”. Ser inmigrante es lo que tiene: un código de barras que o pasa por aduana o se queda en cuarentena como cabeza de turco.


Comentarios
my maaaan...
Frank Lucas
si te ponen pegas,
diles que tienes un hermano más mafioso que El Padrino IV todavía,
il signore Don Pinto,
y que si quieren referencias aduaneras llamen al puesto de control Serbía-Bosnia, que un tal PIETRXR**?!?" les dará info.
(^o^)
Amb el dius creuats i un tros d fusta a la butxaca pq tot et vaja be, el sanguango te diu see ya later...
Quizá si saben de eso vean con mejores ojos tu estancia en el pais.
Un beso Sara